Hace tiempo que no dibujo.
Hace tiempo que no tomo un lápiz para perderme en sus trazos.
Hace tiempo que no siento la textura del papel, de las acuarelas.
Hace tiempo que no encuentro mapas en los hilos que bordan.
Hace tiempo que no me siento artista.
Hace tiempo que todo es un espejismo.
Me regalo una postal. Me regalo las imágenes de las etapas. Me regalo los enunciados aunque estén llenos de tristeza. Me regalo el tiempo del presente. La novedad del ahora. La curiosidad por aprender la novedad que trae el asombro. Me regalo un libro. Me regalo el paisaje inquietante, árido, caluroso. Me regalo la invisibilidad, esa sensación de ir desapareciendo. Me regalo la distancia para ver en qué punto de vista me fui perdiendo. Me regalo la posibilidad de volver a construir una nueva versión de mi.
De la serie: “Me regalo una postal”, en proceso.
N.